AL LLEGAR LA NAVIDAD
“TIEMPO DE REGOCIJO, DE COMPARTIR,
DE VIVIR EN UNIDAD”.

Siempre ha de ser grato vivir como una sola familia la conmemoración de un año más en que honramos a Dios reviviendo los pasajes de su llegada, la llegada de Él a nuestras vidas como Redentor y Salvador.
Debemos permitir que en el corazón de cada uno abunden sentimientos de amor, de paz, de generosidad, de reconciliación y de fraternidad para que la felicidad de estas fiestas se vea motivada por nuestra verdadera entrega a Dios obrando en armonía y siguiendo los santos mandatos que Él nos ha dejado.
“Navidad no es pobre sin regalos, Navidad es rica y dulce si hay amor. El amor enriquece y fortifica el alma, por eso en este día en que nace El Creador brinda el más ambicioso sentimiento, para que en unión formemos pronto la inagotable fuente de sabiduría y don. Tendida por siempre mantén la mano para que recibas en ella con ternura un preciado corazón, dando gracias al cielo porque el amor sea la ilusión”. Dispongamos el corazón para que sirviendo a los demás podamos ser felices durante estas fiestas y siempre.
Mi mayor deseo es la felicidad para todos ustedes en esta Navidad, y un año venidero pletórico de grandes dichas con buena salud, mucho amor y prosperidad, con entrega verdadera, en unión familiar y con pleno bienestar.

ORLANDO GIRALDO ARANGO, OGA